El presidente anunció que ordenará investigar «la responsabilidad de los funcionarios del Estado en el encubrimiento» del atentado a la sede de la mutual judía.

El presidente Alberto Fernández anunció ayer que ordenará a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) «desclasificar los testimonios secretos brindados por agentes de inteligencia en los juicios en los que fuera investigado el atentado a la AMIA».

Al pronunciar su discurso ante la Asamblea Legislativa, en el marco del acto de apertura de un nuevo período de sesiones extraordinarias del Congreso, el mandatario anunció que investigará «la responsabilidad de los funcionarios del Estado en el encubrimiento» del atentado a la sede de la mutual judía, ocurrido en 1994.

«Lo mismo haremos con toda documentación reservada que exista en el organismo sobre el tema», remarcó.

Asimismo, el mandatario informó que emitirá «un decreto de necesidad y urgencia que modifique la Ley de Inteligencia impidiendo a organismo de inteligencia y a sus miembros realizar tareas represivas, poseer facultades compulsivas, cumplir funciones policiales o desarrollar tareas de investigación criminal como auxiliares de la Justicia». «No habrá excepción alguna que quiebre esa resolución», aseguró.

«De esta manera, a paso firme, estamos poniendo fin al secretismo con que se manejan parte de los fondos públicos, a la influencia de la inteligencia estatal en las investigaciones judiciales y a cualquier forma de espionaje político», sostuvo Fernández.