Fue tras tres allanamientos realizados en la ciudad de Córdoba. Además, fueron detenidas diez personas.

El fiscal Tomás Casas dispuso ayer la detención de diez personas y el secuestro de unos mil vehículos en el marco de una investigación por la presunta comercialización de autopartes robadas.

El operativo, del que participó personal de la Unidad Judicial Sustracción Automotores y a la División Sustracción Automotores de la Policía de la Provincia, incluyó tres allanamientos en diferentes predios de la ciudad de Córdoba.

Como resultado del procedimiento se secuestró más de mil automóviles y autopartes -todos ellos en infracción a la ley de comercialización- y se detuvo a una persona, señalada como responsable de la maniobra delictiva, y de nueve colaboradores. Todos los sospechosos fueron imputados.