Así lo reveló un informe del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, el cual precisa que los sueldos sufrieron, en términos reales, la mayor baja desde 1995.
El Gobierno nacional reconoció ayer que el aparato productivo y el empleo atraviesa la peor caída desde 2002 debido a la crisis económica provocada por la pandemia de coronavirus, la cual está dejando «profundas secuelas».
Así lo reveló un informe del Ministerio de Desarrollo Productivo, el cual alerta que las suspensiones alcanzaron un récord histórico y los sueldos cayeron 7,9 por ciento en términos reales, la mayor caída desde 1995.
El informe elaborado por el Centro de Estudio para la Producción, advierte que «si bien el aparato productivo continuó su recuperación en junio, la pandemia está dejando profundas secuelas que agravan una situación ya desfavorable en 2018 y 2019».
Asimismo, agrega que entre febrero y mayo «el 3,9% de las empresas dejaron de enviar sus declaraciones juradas a Afip y con el correr de los meses, se podrá conocer si estas bajas son definitivas o solo transitorias».
Sin embargo, anticipa que «es un indicador que ilustra el severo daño que generó el coronavirus».
Respecto a la situación de la industria, el informe destaca el aumento de la utilización de energía y que en junio la fabricación de vehículos cayó 34,5 por ciento frente a la baja del 84 por ciento registrada en mayo.
Además, el informe resalta también la recuperación de la producción de insumos para la construcción, que «pasó de la parálisis a una actividad significativa, mientras el consumo de energía de este sector cayó 64% interanual». Y agregó: «Patrones similares se encuentran en las plantas textiles, cuya demanda de energía caía al 70% interanual en abril y al 45% en mayo, y al 7 de julio se recortó al 17%».
En cuanto a la situación del empleo, el análisis señala que «entre febrero y abril se destruyeron 174.000 empleos de calidad en las empresas, con una baja del 2,9%, la mayor caída desde principios de 2002» y agrega que el empleo independiente formal cayó 3,4% en monotributistas y 4,9% en autónomos en dos meses.
Además, destaca que en mayo se desaceleró la caída del empleo, aunque reconoce que la recuperación de empleos «de calidad posiblemente demore un tiempo más en ser una realidad».
El informe sostiene que las remuneraciones en el sector privado formal cayeron 7,9% en términos nominales, “el mayor valor desde por lo menos 1995″. «La principal razón radica en las suspensiones, que alcanzaron al 8,8% del empleo registrado en mayo, el mayor guarismo desde que hay registro», afirma.
Finalmente, el estudio señala que en junio las ventas por el programa «Ahora 12» crecieron un 18% interanual y agrega que en la primera quincena de marzo.