El presidente presentó distintas líneas de acción para el desarrollo de obras públicas con perspectiva de género. “En el siglo XXI no podemos soportar más vivir en una sociedad que discrimina por el origen, la raza o el género”, afirmó.

El presidente Alberto Fernández encabezó ayer, a través de una videoconferencia, la presentación de distintas líneas de acción para el desarrollo de obras públicas con perspectiva de género en todo el país, que incluyen la ejecución de trabajos que promueven la paridad laboral, y el financiamiento de proyectos para el cuidado y el acceso a derechos de mujeres, niñas, niños y adolescentes.

“Queremos una sociedad con más respeto por la diversidad, más cuidado por la mujer y más igualdad para todos”, señaló el mandatario desde la residencia de Olivos, donde estuvo acompañado por los ministros de Obras Públicas, Gabriel Katopodis; y de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta; y la presidenta de AySA, Malena Galmarini.

En este contexto, el jefe de Estado aseguró que “cuantas más posibilidades damos en la diversidad y cuanto más achicamos la diferencia entre hombre y mujeres estamos haciendo una sociedad mejor”, y afirmó: “En el siglo XXI no podemos soportar más vivir en una sociedad que discrimina por el origen, la raza o el género”.

En otro tramo de su discurso, el mandatario recordó que “ayer Micaela García hubiera cumplido 25 años, quien dio nombre a una Ley que nos obliga a reflexionar sobre la necesidad imperiosa de terminar con la violencia de género, y que nos obliga a repensar qué hicimos, qué hacemos y qué debemos hacer para que entendamos que no hay más espacio para ser tolerantes con los violentos, y que una mujer deba soportar la violencia de otro”.

“El mejor regalo que le podemos hacer a Micaela es crear lugares específicos para la atención y la protección de la mujer víctima de violencia de género, pero también incluirla en el proceso productivo de la Argentina”, añadió Fernández al tiempo que aseguró: “A pesar de todo lo que estamos haciendo debemos reconocer todo lo que nos falta”.

Y destacó: “La mujer debe estar incluida en el circuito productivo porque es central en el proceso que hoy vivimos. No consideramos como trabajo las tareas que realizan las mujeres día a día en sus casas: la crianza, el cuidado de las familias, que por imperio del patriarcado nunca fueron valoradas. Somos el resultado del amor y el cuidado de nuestras madres, nunca remunerado y necesariamente reconocido”.

El Ministerio de Obras Públicas, en articulación con la cartera de Mujeres, Géneros y Diversidad, realizará la construcción de los dos primeros Centros Territoriales de Políticas de Género y Diversidad en el partido bonaerense de Quilmes y en la ciudad pampeana de Santa Rosa, por una inversión de 90 millones de pesos.

Además, en el marco del plan Argentina Hace se ejecutarán obras de construcción y equipamiento para los Centros Integrales para la Mujer de Río Grande (Tierra del Fuego), por 25 millones de pesos; Trelew (Chubut), por 17,6 millones; y San Martín de los Andes (Neuquén), por 1,3 millones.

Esos trabajos tendrán como objetivo fomentar el cuidado y el acceso a derechos de mujeres, niñas, niños y adolescentes de todo el país, además de garantizar la participación de las áreas de género locales en la formulación de proyectos para revertir la alta e histórica preponderancia masculina en el sector de la construcción.

Por otro lado, la cartera de Obras Públicas se encuentra elaborando un Manual para la Gestión de la Obra Pública con Perspectiva de Género, que incluirá herramientas y materiales con recomendaciones y buenas prácticas para los gobiernos provinciales, municipales y contratistas.